Emprender legal es rentable.

Ciertamente al principio cuando estamos sembrando nuestras ideas de negocio, todo parece muy difícil o costoso, quizás, en este momento puedes creer que ahorrarte unos ceros en la formalización de tu negocio – para hacerlo mas tarde– puede ser una buena idea o una forma de ahorro. Créeme que no hay nada mas costoso que reparar.

Los aspectos legales de tu emprendimiento no pueden esperar a que las cosas vayan bien, porque indefectiblemente en algún momento te encontrarás en una situación que escapa de tu control. Sobre ese riesgo no tienes garantía y el riesgo es grande, porque finalmente los aspectos legales son los que sostienen a tu idea de negocio, tu know how, aquello que ofreces a tu consumidor y si pierdes aquello que negocias… naturalmente las cosas se verán mas difíciles o hasta frustrantes.

Este pensamiento me recuerda a un versículo bíblico, y es que más allá de la fe que cada uno pueda profesar, la Biblia es un libro que guarda muchas palabras sabias y que pueden ser útiles en muchas áreas de la vida y por supuesto también en los negocios.

Asi que, él que piensa estar firme, mire que no caiga.

1 corintios 10.12

Por eso al iniciar un emprendimiento te recomiendo considerar los siguientes ítems que, puede decirse, son los pilares de tu negocio:

1. Si emprendes con alguien más, los compromisos y tareas deben estar bien definidos. Te recomiendo que explores para entender como avanzar con este punto un pacto de socios o acuerdo de emprendimiento conjunto en el cual ambos se comprometan a llevar a delante el proyecto con las condiciones definidas.
2. La estructura jurídica de tu emprendimiento será lo que te permitirá crecer y presentarte ante el consumidor como una opción potable, parte de ello es la identidad corporativa que, no se resume a un logo sino a un nombre comercial que exista realmente, esto puede materializarse por medio de la constitución de una E.A.S que si inicias solo o con alguien más es igualmente una opción viable. Lo notable de las E.A.S es que colaboran ademas con las finanzas del emprendimiento ya que separa el patrimonio personal de aquel destinado al proyecto y le otorga una identidad impositiva.
3. Otro de los valores necesarios que te ahorrarán perdidas económicas es asegurarte que la marca con la que estas operando cuenta con las autorizaciones requeridas para que trabajes con ella, si es una que desarrollaste desde el principio, asegúrate de que esté disponible para su registro e inicia inmediatamente con el proceso, una marca no es tuya solo porque escogiste el diseño del logo o porque la utilizas en la redes, se convierte en tu propiedad única y exclusivamente a través de un proceso de registro ante la dependencia que otorga ese derecho, en el caso de la Paraguay es la DINAPI. Asegúrate ademas de tener protegido tu dominio para reforzar la protección intelectual de tu emprendimiento.
4. Habilitaciones, permisos y licencias. En el caso de que el rubro con el que operas, requiere de estos permisos, no dejes para después enfocarte en estos tramites ya que descuidar estos puntos pueden causarte perdidas en tu patrimonio a consecuencia de las elevadas multas que ocasionan no contar con estas autorizaciones. Si no sabes que las necesitas, busca ayuda, infórmate.
5. Otro de los puntos de fuga de valor es no proteger el know how de tu empresa con tus colaboradores. Proteger tus ideas con contratos permitirá que la confidencialidad sea un asunto garantizado y de esta forma, tus métodos, procedimientos y desarrollo de mercado de tu producto no terminará en conocimiento de tus competidores.

«Cualquiera puede generar un negocio rentable, pero aquel negocio que es considerado empresa es aquel que puede operar aunque tú no estés y en el cual todos los posibles escenarios esten previstos o por lo menos visualizados en su mayoría»

Las buenas ideas populan por todas partes, pero el éxito, no se trata de las buenas ideas sino de la buena conducción, el emprendimiento que llegara más lejos es aquél que se ocupa de cumplir con todos las áreas para operar correctamente y alcanzar sus objetivos: vender a su público consumidor.

No busques un emprendimiento fallido, empieza bién, emprende mejor.

Si quieres explorar alguno de estos puntos, o requieres mayor información sobre alguno de ellos, estoy para ayudarte, contáctame en el siguiente botón.